(Foto ©Chico Sánchez-Derechos Reservados)

Este audiovisual lo realicé durante la Feria de la Risa, el encuentro de payasos que organiza la Hermandad de Payasos Latinos A.C. en Ciudad de México. Una gran experiencia. Pasé varios días enteros entre payasos y descubrí que detrás de su aparente frivolidad hay una gran humanidad. La anécdota más divertida que recuerdo fue durante una manifestación de los payasos por la paz. Un grupo de payasos tomaron un carrito de una muchacha jóven que vendía perritos calientes, y pretendiendo que se lo robaban, iban y venían corriendo y riéndose burlones mientras la chica, riéndose a carcajadas, corría tras ellos. Tras unos minutos de bromas los payasos pararon y llamaron a los
otros. Como eran tantos, compraron a la muchacha casi todos sus perritos, un gran ejemplo de cómo lo que parecía una broma cruel ocultaba la intención de ayudar a vender a la muchacha toda su mercancía. Puedes ver el audio-slide show a continuación.